- Hace algunos años, se viralizó en Chile un registro de mediados de los años 70 donde un conocido conductor de televisión entrevistaba a un joven que presentaba tics muy pronunciados acompañados de palabras ofensivas. Más tarde se sabría que el adolescente sufría de Síndrome de Tourette, y que, gracias a ese video y otros ejemplos, se tomó a la burla contribuyendo así a la estigmatización social de quienes padecen este trastorno neurológico.
Sin embargo, el Síndrome de Tourette, llamado así gracias a Georges Gilles de la Tourette, quien fue el primero en describir este trastorno en 1885, viene acompañado de un componente emocional importante que se genera en la infancia, como traumas, abusos y duelos, provocando primero, tics motores y luego tics verbales incontrolables e involuntarios, ambos en distinta severidad.
Así lo recalcó el Dr. Alexander Peters, neurólogo pediatra, y parte de la Unidad de Neurología Infantil del Hospital Puerto Montt, cuyos profesionales han estado realizando una labor destacada en la identificación, tratamiento y apoyo de pacientes con Síndrome de Tourette, una condición neurológica que afecta a niños y adolescentes, y que está caracterizada por movimientos repetitivos o sonidos indeseados que no se pueden controlar.
“En general los tics se pueden presentar en niños muy pequeños, desde los 3 hasta los 15 años, y el promedio de aparición es alrededor de los 6 años, es decir, cuando los niños comienzan su escolaridad. No es extraño encontrar que los tics aparezcan en contextos de violencia intrafamiliar, traumas o procesos de duelo, separación de los padres, mal rendimiento académico o víctimas de bullying”, señaló el Dr. Peters.
Tipos de Tics y Evaluación Clínica
Es importante diferenciar entre tics motores y tics sonoros. Los tics motores suelen ser los primeros en aparecer y pueden incluir movimientos como la elevación de hombros, movimientos en la comisura de los labios o levantar las cejas. Para diagnosticar el Síndrome de Tourette, deben estar presentes tanto tics motores como tics verbales, que pueden incluir carraspeos, chasquidos y, en casos más severos, palabras o insultos.
El diagnóstico se basa en una evaluación clínica exhaustiva. "Preguntamos sobre los datos perinatales, el desarrollo, el rendimiento académico y el ambiente familiar del niño. Siempre hay algo puntual en la vida del niño que puede estar afectándolo emocionalmente," señaló el Dr. Peters. Es común que los niños con trastornos del espectro autista (TEA) presenten tics, y viceversa, por lo que el diagnóstico diferencial es esencial.
Tratamiento y Apoyo
Muchos tics que aparecen en la infancia temprana tienden a desaparecer con el tiempo. Menos del 25% de los niños con tics continúan presentándolos en la adolescencia, y un porcentaje aún menor en la adultez. El tratamiento farmacológico se reserva para los casos en que los tics son demasiado notorios o molestos. El Hospital Puerto Montt dispone de los medicamentos necesarios y recomienda complementar el tratamiento con terapia psicológica.
Además de los tratamientos médicos, se enfatiza la importancia de crear un entorno de apoyo para el niño, tanto en casa como en la escuela. "Sin intervención en el entorno del niño, difícilmente desaparecerán los tics," recalcó el Dr. Peters. Los tics pueden generar angustia, trastornos del ánimo, del sueño y fobia social, afectando significativamente la calidad de vida del paciente. Es común que los niños mayores aprendan a controlar sus tics en público, pero los experimenten en casa, en un fenómeno conocido como "descarga motora".
Reducción de la Estigmatización
Históricamente, el Síndrome de Tourette ha sido objeto de burla y malentendidos, lo que ha contribuido a la estigmatización de quienes lo padecen. Sin embargo, el aumento de la visibilidad del síndrome a través de las redes sociales y otros medios ha ayudado a mejorar la comprensión pública. "Mientras más se habla de este tema, más fácil es que la gente tome consciencia y se pierda la estigmatización," afirmó el Dr. Peters.
El Futuro del Tratamiento en el Hospital Puerto Montt
El Hospital Puerto Montt ofrece tratamiento integral a los pacientes con Síndrome de Tourette. Esto incluye no solo el uso de fármacos, que se recetan principalmente durante el periodo escolar, sino también el acceso a exámenes adicionales cuando sea necesario.
"Es crucial explicar a los padres que los tics no serán permanentes y que tienen solución. El manejo es más simple de lo que se cree y no implica un uso excesivo de fármacos. La consulta a tiempo es fundamental, y actualmente hay una mayor conciencia y sospecha del tema a nivel de atención primaria," concluyó el Dr. Peters.